«El surgimiento de las comunidades transnacionales de inmigrantes es un fenómeno que se da en el plano comunitario pues se origina a partir de la iniciativa de personas comunes de establecer, mantener, y extender vínculos económicos, políticos y sociales duraderos con las familias y comunidades que dejaron atrás al emigrar, a la vez que se adaptan a la vida en sus países de asentamiento».
(Robinson, R.,
La globalización y el impacto del accionar transnacional de los inmigrantes en el desarrollo económico de sus países de origen,
Revista Futuros, consultado el 23-09-2009)
«Al trasladarse los emigrantes a países más desarrollados e integrarse dentro de sus aparatos productivos acceden a unos niveles de renta inalcanzables en sus naciones de origen, lo que les permite hacer partícipes a sus familiares de ese mayor bienestar conseguido, a través del envío periódico de dinero. Y, como es lógico, cuanto mayor es el número de emigrantes implicados en el proceso, mayor es también el flujo periódico de remesas hacia sus respectivos países de origen, hasta el punto de que para algunos de ellos la rúbrica de las remesas de emigrantes es uno de los principales componentes, sino el principal, de su balanza de pagos».
(Banco Interamericano de Desarrollo (BID),
Las remesas de emigrantes entre España y Latinoamérica, consultado el 23-09-2009)
Una nueva perspectiva en los estudios migratorios
«El enfoque transnacional de los procesos migratorios surge en los años noventa como respuesta a las investigaciones que se venían desarrollando sobre el fenómeno migratorio y que centraban su análisis únicamente en lo que ocurría en la sociedad receptora de migrantes. El eje de interés tanto teórico como empírico de esta perspectiva estaba puesto en la interconexión y en los múltiples vínculos existentes entre los migrantes y sus países de origen. Los trabajos pioneros de Glick Schiller, Basch y Szatón-Blanc mostraron cómo los migrantes no rompían los vínculos con sus sociedades de origen, por el contrario, mantenían fluidas relaciones económicas, sociales y políticas con sus países a medida que se integraban en la sociedad receptora (Glick Schiller, Basch y Szatón-Blanc, 1992). Estas autoras definían entonces al transnacionalismo como un proceso social donde los migrantes operan en campos sociales que traspasan fronteras geográficas, políticas y culturales (Glick Schiller, Basch y Szatón-Blanc, 1999). Partiendo del concepto de campo social, definido como el conjunto de múltiples redes entrelazadas de relaciones sociales, a través de las cuales se intercambian de manera desigual, se organizan y se transforman las ideas, las prácticas y los recursos (Levitt y Glick Schiller, 2004:66) sugieren que el campo social transnacional es el campo que conecta a diferentes actores a través de las fronteras nacionales y mediante relaciones directas e indirectas (Levitt y Glick Schiller, 2004:67)».
(Moraes, N.,
Movilización comunitaria y vinculación transnacional: el movimiento asociativo de Migrantes uruguayos en España,
Migraciones y desarrollo2007, consultado el 23-09-2009)
En vías de una política migratoria internacional
«Las
migraciones internacionales se han convertido en un punto prioritario del orden del día de las políticas mundiales. Dado el crecimiento del volumen, el alcance y la complejidad de esta cuestión, los Estados y otros actores han tomado conciencia de los retos y oportunidades que presentan las migraciones internacionales. En todo el mundo, hoy se constata que deben aprovecharse mejor las ventajas económicas sociales y culturales de las migraciones internacionales y que las consecuencias negativas de los movimientos fronterizos podrían abordarse de modo más apropiado».
(Comisión Mundial sobre las Migraciones Internacionales,
Las migraciones en un mundo interdependiente: nuevas orientaciones para actuar, consultado el 23-09-2009)
Los «acuerdos bilaterales pueden ser mucho más beneficiosos para los connacionales que el convenio iberoamericano. Es el caso de Chile y Perú, donde existe la "transportabilidad" de las pensiones, que no es lo mismo que exportarlas. La transportabilidad implica que los fondos se envían al país donde la persona se va a pensionar, mientras que la exportación implica pagar la pensión en el país de residencia del jubilado.»
(Castañeda, L.,
Convenio iberoamericano simplifica acceso a pensión y cobro de los migrantes,
El mercurio citado en Trabajo y equidad, diciembre, 2007, consultado el 27-07-2010)
Permisos de trabajo y ciudadanía
En el último tiempo ha habido cambios con respecto a la legislación de los países del hemisferio norte que tradicionalmente han recibido a los migrantes, lo que ha significado una mejora en la calidad de vida de los migrantes. Por ejemplo, el relajamiento de las restricciones sobre doble ciudadanía en muchos países y el ambiente económico, posibilitan a los migrantes llevar «una doble vida», mantener vínculos estrechos con el país de origen y con el país de residencia, además de permitir que los migrantes se involucren en el progreso económico de sus países de origen. Esto ha motivado, cada vez más a los gobiernos de los países de origen a establecer o a revisar las leyes para fortalecer el involucramiento de sus diásporas en los procesos de desarrollo nacional. Sin embargo, a pesar de esta tendencia, que se ha acompañado de la elaboración de marcos internacionales para favorecer la migración y proteger a los migrantes, también se siguen aplicando leyes más restrictivas como las que no permiten a los migrantes pasar más de un cierto tiempo en el país que los recibe y las que se aplican en ciertos países para otorgar la ciudadanía o permisos de trabajo.
Probablemente esto se deba a que al obtener la ciudadanía el migrante pasa a tener derechos plenos de ciudadano que no tiene siendo migrante. Lo mismo sucede con los permisos de trabajo, que muchas veces suelen ser el primer paso para llegar a ser un actor económico dentro de la realidad social del país de acogida.
Fuera de este marco legal, también se encuentra la situación de los inmigrantes ilegales, que son los que corren mayor riesgo de sufrir atropellos, aunque siguen siendo actores económicos importantes.
(adaptado del Bonilla, M.,
La construcción de la imagen y el estatuto del inmigrante-indocumentado en la España de la época de la Globalización,
Programa Andino de Derechos Humanos, 2003, y
Programa Andino de Derechos Humanos y la Organización Internacional de Trabajo (OIT), consultados el 23-09-2009)
Mujeres migrantes
«Actualmente, las mujeres constituyen casi la mitad del total mundial de migrantes internacionales: 95 millones. No obstante, pese a que contribuyen a la reducción de la pobreza y a economías que luchan por desarrollarse, sólo recientemente la comunidad internacional comenzó a percatarse del significado de lo que pueden ofrecer las mujeres migrantes.
Cada año, millones de mujeres que ocupan millones de empleos en el extranjero envían centenares de millones de dólares en remesas a sus hogares y comunidades de origen. Esos fondos van a saciar bocas hambrientas, vestir y educar a los niños, costear servicios de salud y, en general, mejorar los niveles de vida de los seres queridos que quedaron atrás. Para los países anfitriones, el trabajo de las mujeres migrantes está tan imbricado en la trama misma de la sociedad, que casi no se percibe. Las mujeres migrantes realizan duros trabajos en los hogares de familias de trabajadores, atienden a los enfermos y reconfortan a los ancianos. Aportan sus conocimientos técnicos y profesionales, pagan impuestos y apoyan calladamente una calidad de vida que muchos dan por sentada».
(Fondo de Población de las Naciones Unidas,
Estado de la población mundial 2006, consultado el 23-09-2009)
Trabajadoras familiares auxiliares
«El paso de trabajadora familiar auxiliar sin remuneración o trabajadora por cuenta propia con bajos ingresos al de empleo remunerado y asalariado es importante para la independencia y autodeterminación de muchas mujeres. Sin embargo en las regiones más pobres del mundo el número de trabajadoras familiares auxiliares como parte del empleo total sigue siendo mucho más alto que el de los hombres, y tienen menos oportunidades de convertirse en trabajadoras remuneradas y asalariadas».
(Organización Internacional del Trabajo (OIT),
Tendencias mundiales del empleo de las mujeres 2007: Estudio de la OIT advierte sobre la feminización de la pobreza laboral, 2007, consultado el 23-09-2009)
«Los sudamericanos (filipinos y otros) emigran al Primer Mundo para cuidar niños o ancianos de familias acomodadas. Con lo que ganan, mantienen a sus familias en sus países de origen, e incluso pagan a cuidadoras para que se ocupe en su país de origen de sus propios hijos y ancianos.
Así, las mujeres más pobres asisten a ancianos o a niños de los más ricos, mientras que otras mujeres aún más pobres, ancianas y rurales cuidan a sus propios niños y ancianos. El resultado son las familias transnacionales.»
(Diario Vasco,
Floridización invisible, 2005, consultado el 27-07-2010)
Fuga de cerebros
«El personal altamente calificado contribuye de modo significativo a la competitividad empresarial y a la expansión de la economía mundial. Por lo tanto, es necesario facilitar su movilidad. Los Estados tienen el legítimo deber de proteger a sus ciudadanos contra la competencia injusta de extranjeros y, evidentemente, seguirán actuando de esta manera. Incluso así, los gobiernos y el sector privado deben reunirse para repasar los obstáculos a la movilidad profesional a fin de eliminar aquellos que impiden que las empresas desplieguen al personal adecuado, en el lugar y el momento oportunos».
(Comisión Mundial sobre las Migraciones Internacionales,
Las migraciones en un mundo interdependiente: nuevas orientaciones para actuar, 2004, consultado el 02-02-2010)