País de acogida de empresas multinacionales
El
país de acogida es un país en el cual opera una compañía transnacional por medio de la creación de una filial nueva, la adquisición de una entidad ya existente, la formación de una empresa en participación, o la subcontratación con empresas locales.
(adaptado de Dicken, P.,
Global Shift: reshaping the global economic map in the 21st century, 4. ed., New York: Guilford Press, 2003, p. 278)
«El advenimiento de las empresas multinacionales en la esfera económica mundial y, especialmente sus actividades en el decenio de los años 1960, provocó intensos debates que dieron como resultado los esfuerzos para elaborar instrumentos internacionales con el cometido de regular su conducta y definir los términos de su relación con los
países de acogida».
(Organización Internacional del Trabajo (OIT),
Empresas multinacionales, consultado el 21-07-2010)
La Declaración de la OIT sobre las empresas multinacionales y la política social
«La búsqueda por parte de la OIT de orientaciones internacionales en lo tocante a los asuntos de su incumbencia se plasmó en la adopción, en 1977, por el Consejo de Administración, de
la Declaración tripartita de principios sobre las empresas multinacionales y la política social (Declaración EMN) […]. Los principios establecidos en este instrumento internacional ofrecen a las EMN, a los gobiernos, a los empleadores y a los trabajadores orientaciones en materia de empleo, formación, condiciones de trabajo y de vida y relaciones laborales».
(Organización Internacional del Trabajo (OIT),
Empresas multinacionales, consultado el 21-07-2010)
«Las empresas multinacionales desempeñan un papel muy importante en las economías de la mayor parte de los países y en las relaciones económicas internacionales, que es de interés creciente para los gobiernos, así como para los empleadores, los trabajadores y sus respectivas organizaciones. Mediante las inversiones directas internacionales y otros medios, estas empresas pueden aportar ventajas substanciales al
país de acogida y los países de origen, contribuyendo a una utilización más eficaz del capital, la tecnología y el trabajo. En el marco de las políticas de desarrollo establecidas por los gobiernos, pueden aportar también una contribución muy importante a la promoción del bienestar económico y social; a la mejora del nivel de vida y la satisfacción de las necesidades básicas; a la creación de oportunidades de empleo, tanto directa como indirectamente; y a la promoción de los derechos humanos básicos, incluida la libertad sindical, en todo el mundo. Por otra parte, los progresos realizados por las empresas multinacionales en la organización de sus operaciones que transcienden el marco nacional pueden dar lugar a una concentración abusiva de poder económico y a conflictos con los objetivos de la política nacional y los intereses de los trabajadores. La complejidad de estas empresas y la dificultad de percibir claramente sus estructuras, operaciones y planes son también motivo de preocupación en el
país de acogida, en el país de origen o en ambos».
(Human Rights Library,
Declaración tripartita de principios sobre las empresas multinacionales y la política social, University of Minnesota, no. 3. 2000, consultado el 21-07-2010)
Principios de la OCDE
El espíritu de los principios de la OCDE es alentar el desarrollo económico y permitir que los pueblos disfruten de sus beneficios. Estos principios establecen que las empresas multinacionales deberían hacer todo lo posible por mejorar las condiciones laborales y económicas de los
países de acogida. A su vez, los
países de acogida también deben contar con mecanismos eficientes para poder controlar y sopesar las acciones de las empresas multinacionales. Esto último es especialmente importante cuando se trata de evitar que las economías de los
países de acogida dependan demasiado de las empresas multinacionales o que estas tengan mucho poder.
(adaptado de Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE),
Marco de acción para la inversión, 2006, consultado el 21-07-2010)
Principales países de acogida:
Se podrían establecer tres tipos fundamentales de
países de acogida, según el tipo de agentes económicos que reciben y las características específicas que han que cada país se transforme en un
país de acogida:
- Países cuyo mayor atractivo son las riquezas naturales que hay por explotar. Este sería el caso de muchos países de América Latina y el África subsahariana.
- Países que cuentan con una mano de obra barata y pocas regulaciones laborales, como sucede en muchos países Asiáticos y muchos países de América latina. Por ejemplo, la proliferación de maquiladoras en Méjico y El Salvador.
- Por último, dentro del mundo desarrollado están los países que ofrecen beneficios, estabilidad y garantías para recibir capitales extranjeros, como Luxemburgo, Suiza, Estados Unidos y Francia, entre otros.
(adaptado de Simon, G.,
¿Qué países reciben inmigrantes, qué cantidad, desde cuándo, con qué fin, cómo? Un breve panorama planetario,
El Correo de la Unesco, consultado el 21-07-2010)